lunes, 30 de mayo de 2011

TODO O NADA

Cuando todavía la resaca de la impresionante borrachera que ha supuesto la campaña electoral, con argumentos suficientes como para escribir un sainete, resulta complicado en tan poco espacio analizar los aspectos de todo lo ocurrido, donde la incertidumbre ha dado paso a la euforia de unos y el desencanto de otros.

Vaya por delante la sorpresa que para muchos ha supuesto la pérdida de la mayoría absoluta del Partido Popular, que lidera Mónica Lorente. Sin embargo, otros decían que era algo que se veía venir. Por otro lado, destacar el gran salto de Clr-Claro que comanda Pedro Mancebo. Así como la pérdida de un concejal, aunque con más votos, por parte del Psoe y el mantenimiento de los Verdes. El caso es que después de veinticinco años de gestión municipal de los populares, podría iniciarse una nueva etapa política en Orihuela.

La realidad, al día de hoy, es que se están viviendo momentos de incertidumbre, desasosiego y preocupación, pronto llegará el 11 de Junio, junto a una multitud de opiniones de la ciudadanía donde cada uno como en un tablero de ajedrez, tiene su solución, aunque muchas de ellas inviables. Por lo que intentaré hacer algunas observaciones.

Siguiendo la lógica debería seguir gobernando el Partido Popular al ser la lista más votada. Pero como la Ley es clara, la suma de los 13 concejales del resto de partidos es evidente que dan la mayoría. Ahora bien, lo primero que habría que preguntarse si el Psoe, Clr-Claro y los Verdes parten de una voluntad de entendimiento.

Hay que saber que Antonia Moreno, ya lo anticipó en los Debates de La Salesas, UMH., diciendo: " En el caso de que el PP. perdiera la mayoría absoluta y el Psoe fuera la lista, inmediatemente, más votada, me correspondería a mí ser la alcaldesa y mis votos no se los daría a nadie ". Y legítimamente, preguntó: " Clr-Claro y los Verdes, me los darían a mí ". Como verán, una situación difícil y complicada.

A mi entender, y salvo que se demuestre lo contrario, aún siendo legítimo, están predominando los egos. Me consta que, en estos momentos, existen conversaciones a todos los niveles: pacto, forma de gobierno, reparto de competencias etc., sin que hayan entrado en quién ocupará el sillón municipal.

Durante estos últimos cuatro años, sobre todo en esta última campaña electoral, hemos visto y oído actitudes y puntos de vista de los grupos de la oposición que habría que preguntarse: ¿ Ahora, sigue siendo así ?. Una duda que está invadiendo a gran parte de la ciudadanía. Es sencillo comprender que despreciar la razón y aceptar las cosas es mucho más fácil que indagar la racionalidad y sus consecuencias. A este paso, no sería de extrañar que Mónica Lorente con su mayoría simple, siguiera de alcaldesa.

También habría que pensar si, ante esta ruleta política, lo que está en juego es la gobernabilidad y el futuro de Orihuela, o algunos juegan al todo o nada.