lunes, 14 de julio de 2008

EL DÍA DEL PÁJARO

Durante estos últimos días, previos a la celebración de las Fiestas de La Reconquista y de Moros y Cristianos, he dedicado algunos comentarios sobre la importancia que Orihuela tiene y conserva de su patrimonio, de su cultura y tradición, así como la grandeza de sus señas de identidad. Aunque en plenas fiestas saturado de todo, cansancio, sueño, calor y otras cosas más, no podría cerrar este pequeño ciclo sin referirme a su mayor exponente: " El Día del Pájaro ".

Este año, una vez más, con el fervor y entusiasmo de siempre y un pueblo entregado celebramos el " Día del Pájaro ". Este 17 de Julio es la fecha memorable de La Reconquista, día éste, en que el año 1242 finalizada la contienda entre moros y cristianos, se escribió: " Enterados de la heróica hazaña el Infante Don Alfonso, hijo del rey Fernando de Castilla, llamado El Santo, admitió a los oriolanos y los llamó dignos descendientes del rey Teodomiro, puso en movimiento sus huestes y ocupó la ciudad en nombre del rey Catolico ".

En tan señalada fecha la Gloriosa Enseña del Oriol, de aquí el bautismo popular del día del pájaro, solo se exhibe públicamente en tan importante efemérides. El Oriol es el emblema de la ciudad, al menos desde 1280, se le añade a la bandera óvalo con las cuatro barras aragonesas al ganar Orihuela Jaime II, en 1296.

Figurando dos orioles simbolizando las dos reconquistas: la castellana y la aragonesa. " Semper Praevaluit Ensis Vester ", Siempre Prevaleció Vuestra Espada, es el lema que orla el escudo de Orihuela y que luce desde su concepción Real en 1594 en su bandera. La cita está tomada del Real Privilegio de Morabatín otorgado a la ciudad por el rey Pedro IV, El Ceremonioso, el 18 de Julio de 1380.

La Enseña del Oriol aparecerá a las cero horas del próximo día 17. Tras las palabras de la Alcaldesa, en presencia de la figura La Armengola, símbolo de la fiesta de La Reconquista, acompañada de los Embajadores Moro y Cristiano, El Síndico, figura histórica que portará la Enseña, dirigirá una alocución a la multitud que allí se va a concentrar que, dicho sea de paso, este año se espera que será más que nunca.

Cosntituía el Oriol una afirmación de las señas de identidad de los oriolanos, como hito entre el reino de Valencia y el de Castilla. La Enseña será bajada por la mañana, con respetuoso celo, verticalmente desde el balcón de la Casa Consistorial, puesto que únicamente se humilla ante Dios y ante el Rey. Privilegio que comparte con la Senyera de Valencia.

Orihuela, siente satisfacción íntima cuando cada año se oye el voltear de las campanas de la Iglesia de Santas Justa y Rufina, cuando repican a un tiempo, de una de las torres más majestuosas de la Comunidad Valenciana anunciando la fecha grande para la ciudad, donde la figura central de la Fiesta se refleja en la Gloriosa Enseña del Oriol, orgullo de todos los oriolanos.

Cuando en la noche de vísperas, noche además de júbilo festero, al son de los himnos nacional y de la comunidad, sentimos escalofríos ante la presencia del Oriol, y con ojos vidriosos de emoción, quizás detengamos el ritmo de nuestro cuerpo para hacer de esos momentos los latidos del eco de nuestra alma oriolana.

Mientras sobre Orihuela caiga a diario el rocío y los oriolanos despierten a la búsqueda del pan de cada día con el esfuerzo y esperanza de una Orihuela mejor y con toda la gloria de nuestro Oriol, seguiremos dignificando el Día del Pájaro.

1 comentario:

Anónimo dijo...

muy bien antonio, muy bien